Cofundadora de Explora Minerals y actual secretaria general de la Cámara Minera de Chile, Céspedes lidera iniciativas para conectar a mujeres mineras de toda Latinoamérica, impulsar un catastro nacional del sector y promover políticas de equidad que rompan con las prácticas arraigadas. “Si no las nombramos, no existen. Y si no existen, nunca tendrán un espacio en las decisiones”, afirma.
Cuando Daniela Céspedes asumió el desafío de continuar con la pequeña faena minera que heredó tras el fallecimiento de su padre en 2017, tenía poco más de 27 años y ninguna formación técnica en geología o ingeniería. Abogada de profesión, su vínculo con la minería venía de una larga tradición familiar que comenzó con su abuelo. Sin embargo, enfrentarse al negocio fue una experiencia dura: “Me cerraron millones de puertas. En cada reunión me trataban de niñita y me bajaban el perfil”.
Con su hermano, resistió las dificultades propias del rubro y la desconfianza que enfrentan las mujeres en la industria. En 2021 decidió dar un giro y cofundar Xplora Minerals, una plataforma dedicada a visibilizar proyectos de exploración con alto potencial de escalar. Actualmente trabajan en tres iniciativas: Iron Black, Copper Phoenix y Copper Phoenix 2. El objetivo era claro: abrir espacios para pequeños mineros, un sector históricamente invisibilizado en el debate público, y particularmente para las mujeres.
Su participación en ferias internacionales como la PDAC en Canadá le permitió tejer redes con cámaras binacionales y gremios internacionales. Desde entonces, integra comités de diversidad y equidad de género en Chile, Australia, Canadá, Estados Unidos y China, y en 2024 asumió un rol clave en la Cámara Minera de Chile como secretaria general.
Pero su inquietud mayor sigue siendo la misma: visibilizar a las mujeres en la pequeña minería. Detectó que muchas de ellas están dispersas, sin redes y sin datos oficiales que las registren. Por eso, impulsa la creación de un catastro nacional que permita diseñar políticas específicas para el sector y abrir el acceso a fondos y oportunidades.
“Si no las nombramos, no existen. Y si no existen, nunca tendrán un espacio en las decisiones”, afirma con convicción.



